Conoce la misteriosa capilla para realizar exorcismos en Querétaro
La capilla para realizar exorcismos es apenas una pequeña parte de este gran complejo religioso, que a cualquiera puede impresionar por su basta historia e importancia en el estado.
En el municipio de Colón, Querétaro, que cuenta con apenas 1,500 habitantes, se construyó una capilla realizar exorcismos; no es una casualidad que haya sido en este estado.
Tras ocho meses de trabajo, en febrero de 2010, se bendijo este recinto dedicado a las Benditas Almas del Purgatorio, ubicado exactamente a un costado de la Basílica de Dolores de Soriano, en el municipio de Colón, en Guanajuato.
Fue el antiguo obispo de la diócesis de Querétaro, el monseñor Mario de Gasperín, quien personalmente consagró la capilla, la cual fue construida con fondos de la propia institución y con aportaciones de los fieles.
Antecedentes recientes de exorcismos en Querétaro
No es nada nuevo que en Querétaro se practique un número elevado de exorcismos; en 2004 se habló sobre posesiones gracias a una carta firmada por el mismo Mario de Gasperín.
En esta se decía que la demanda de estas prácticas era muy solicitada en el estado de Querétaro; de hecho, no escatimó en escribir que se trataban de “verdaderas posesiones diabólicas”, esto, basado en lo que sus propios ojos habían visto.
Los casos recientes de exorcismos en Querétaro
De hecho también se hablaron de números concretos: solo entre 1999 y 2004 se habían atendido cerca de 400 casos de exorcismos en la Diócesis de Querétaro, por lo que decidieron crear el Ministerio del Exorcismo.
Según ellos, estos casos se estaban extendiendo por la proliferación de sectas satánicas, lo que en esos años había colocado al estado en el primer lugar de casos de posesión, aunque muchos de ellos solo se trataban de problemas psiquiátricos.
En fin, este fue el antecedente que haría que unos años más tarde, en 2010, se lograra construir la capilla para realizar exorcismos.
¿Por qué conocer la Capilla para realizar exorcismos en Querétaro?
La capilla para realizar exorcismos es apenas una pequeña parte de este gran complejo religioso, que a cualquiera puede impresionar por su basta historia e importancia en el estado.
De hecho, su historia comienza desde 1682 cuando los franciscanos comenzaron a trabajar en un pequeño pueblo llamado Maconí, realizando misiones por toda la Sierra Gorda de Querétaro; este lugar se convirtió rápidamente en un centro de catequesis; fue construido en diferentes etapas.
Los altos campanarios, las capillas adyacentes de la Basílica y las imágenes religiosas que datan de hace más de 300 años son solo el comienzo de un recorrido que podrás apreciar a tan solo unos minutos del Pueblo Mágico de Bernal.
Capilla del Apocalipsis
A las afueras de la Basílica existe un lugar que es un auténtico museo del misticismo religioso: la Capilla del Apocalipsis.
En ella podrás ver relieves sobre imágenes que hacen alusión al libro del Apocalipsis así como citas del mismo, pero esto solo es en el pasillo exterior; dentro de esta capilla, verás más citas y cuadros sobre los Jinetes del Apocalipsis.
Esta capilla fue construida para la oración de los visitantes del centro de espiritualidad de la Virgen de Soriano, y está dedicada al triunfo de Cristo. Es uno de los lugares más bellos de este complejo religioso.
Los jardines de la Basílica
A los pies de la colosal Basílica hay hermosos y amplios jardines que cualquiera quisiera recorrer; en ellos existen algunas estatuas de piedra que datan de varias décadas, las cuales no puedes dejar de conocer en tu visita.
Entre estos jardines resalta una pequeña pero emblemática capilla. Así es, el lugar donde se realizan los exorcismos.
La Capilla para realizar exorcismos
“Muerte, juicio, infierno y gloria; no apartes de tu memoria”. Esta es la cita que verás a la entrada de la Capilla de la Ánimas del Purgatorio, nombre oficial de la capilla para realizar exorcismos.
La entrada es hermoso vitral en azul donde destacan alguna cruces en lo que aparenta ser un cielo, y abajo, las “llamas del infierno”. Al interior verás una representación de San Rafael y San Miguel, además de más vitrales que suponen las “lágrimas” de las Almas del Purgatorio.
Cinco filas de bancas de madera, columnas rojas y paredes moradas además de una imagen circular de Jesucristo son otros elementos de la capilla; al final está el altar donde se emiten algunas pequeñas misas, pero donde se realizan los rituales exorcistas normalmente.
Abajo del altar se guardan los restos de las seis últimas monjas de Santa Rosa de Viterbo conocidas como “Las Rositas”, quienes fueron a vivir sus últimos días a Colón, Querétaro. Ellas están ahí, dicen, para ayudar a los sacerdotes exorcistas a hacer sus labor.
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