El huatape, uno de los platillos estelares de la cultura huasteca
Servido principalmente con camarón, el huatape es un sustancioso caldo originario de la cultura huasteca mesoamericana que no pierde vigencia.
Cuando hablamos de la historia de la cocina, vale la pena reflexionar que esta ha sido resultado de un largo proceso de experimentación; como es el caso de la gastronomía huasteca, con claros orígenes prehispánicos y basada en el cultivo y aprovechamiento del chile, la calabaza, el frijol y el maíz. Por ello, uno de sus platillos insignia, el huatape, voz que proviene del totonaco, significa “comer chile”.
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El huatape, tradición gastronómica del noreste de México
La región Huasteca abarca porciones de cinco estados del país: San Luis Potosí, Tamaulipas, Veracruz, Hidalgo y Querétaro. De igual forma, se encuentra representada principalmente por los teenek y también por los nahuas, entre otros. De hecho, el huatape en náhuatl es michitlacuali, siendo michin pescado y tlacualli comida o alimento; es decir plato de pescado.
Obviamente, este platillo ha tenido una evolución, primero, al transformarse con la colonización española, en la que se le integró, por ejemplo, carne de cerdo o pollo. Actualmente se consume sobre todo en Tampico, Tamaulipas y en el norte de Veracruz.
¿Qué lleva el huatape?
Básicamente es un caldo bien picante que consiste en una salsa elaborada con tomate verde, cebolla y chile; dependiendo de la receta este puede ser jalapeño, verde, ancho o guajillo. Hay recetas que incorporan además jitomate, ajo, quelites o elotes; y para aromatizarlo, epazote. Por si fuera poco, se espesa agregando masa de maíz.
Dependiendo de la región es el tipo de carne que se le agrega; en Veracruz se le incorporan langostinos, acamayas, pescado o camarón y el caldo es rojo. El huatape también es muy popular en Tampico, donde además lo sirven con lechuga y el caldo es de color verde.
Por su parte, los totonacas del norte de Veracruz lo comen con carne de cerdo o con caldo de frijoles, jitomate, chile chipotle dorado, hoja de aguacate y bolitas de masa.
Finalmente, este manjar es poco conocido fuera de Tamaulipas y Veracruz, pero es de esos platillos que se deben probar por lo menos una vez en la vida. No por nada se dice por ahí que “después del huateque, un huatape de camarón”. ¿Se te antoja?
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