Por primera vez habrá un Festival de Organilleros en la Ciudad de México
Los organillos son una voz histórica de la Ciudad de México. Por ello, el Festival de Organilleros los homenajeará como artistas con gran legado cultural.
Primer Festival de Organilleros en la CDMX
Musica, desfile y exhibiciones de estos tradicionales instrumentos.
La música que resuena por las calles de la Ciudad de México es variada en cuanto a los géneros, sin embargo, lo organillos son instrumentos que desde antaño amenizan nuestros paseos. Para reconocer su relevancia cultural se celebrará el primer Festival de Organilleros.
Las actividades se realizarán en diferentes sedes de la Ciudad de México y para que no te pierdas de ningún detalle, aquí te traemos todo lo que necesitas saber.
¿Qué habrá en el Festival de Organilleros?
En el Primer Festival de Organilleros habrá mucha música, exhibiciones y un desfile. Estas actividades tienen como objetivo visibilizar, rescatar y preservar esta icónica tradición de la CDMX para las futuras generaciones.
Este evento se llevará a cabo del próximo 19 al 21 de mayo. Así que ve preparando tu agenda para este fin de semana.
La inauguración del festival será el 19 de mayo en punto de las 10:00 horas, en la Plaza Tolsá que se ubica en Calle Tacuba 8, Centro, 06010 Cuauhtémoc, CDMX.
El 20 de mayo se realizará una ceremonia en la que se entregarán reconocimientos por trayectoria de más de 65 años a distintos organilleros. Este suceso se celebrará en el Auditorio de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (campus del Centro Histórico), que se ubica en Talavera 20, Centro Histórico, Centro, Cuauhtémoc, 06000 Cuauhtémoc, CDMX.
Ese mismo día, pero en punto de las 16:00 horas, se realizará una presentación musical de los organilleros en la Plaza de Santo Domingo.
Por otro lado, el 21 de mayo, los organilleros y chinchineros desfilarán por las calles aledañas al Centro Histórico de la CDMX. Saldrán desde el Monumento a la Revolución para dirigirse hacia la Plaza Tolsá. El desfile comenzará en punto de las 10:00 horas, así que toma tus precauciones.
Además, habrá una muestra activa de los instrumentos provenientes de nuestro país, así como del resto del mundo:
- Alemania (Berlín).
- Austria (Viena).
- Holanda (Ámsterdam).
- Chile (Santiago).
También podrás apreciar la muestra de siete chinchines que son utilizados por hombres orquestas. Se prevé que en este festival participarán 90 organilleros, de los cuales 30 son mexicanos, 30 de la CDMX, y otros 30 originarios de Chile.
Las actividades son gratuitas y el ambiente será totalmente familiar, por lo que podrás pasar un gran fin de semana con tus seres queridos, mientras aprendes más sobre la variopinta cultura mexicana.
Es importante señalar que estas actividades serán posibles gracias a la propia iniciativa de los organilleros capitalinos.
Historia de los organilleros en México
Los primeros organilleros llegaron a Latinoamérica a finales del siglo XIX, su gesta se dio en Inglaterra en el mismo siglo. A México llegaron gracias a los migrantes alemanes, quienes fundaron la casa de instrumentos Wagner y Levien.
Inicialmente sirvieron para musicalizar los espectáculos circenses y las ferias. Posteriormente, los inmigrantes rentaban los instrumentos para que las personas pudieran ganar dinero haciéndolos sonar en las plazas o en eventos como serenatas. Durante el siglo XX, se comenzaron a importar nuevos modelos de la fábrica “Frati & Company”.
Posteriormente, los dueños de organillos crearon auténticas empresas de concesiones de instrumentos. Algunos de ellos tenían hasta 250 ejemplares, como es el caso de Pomposo Ganoa. Cuando los instrumentos se dejaron de producir en Alemania en 1930, los dueños mexicanos ganaron el monopolio de los organillos. Poco a poco se incorporó música popular a los aparatos, por ello Pancho Villa llevaba un organillo en su pelotón.
Con el paso del tiempo, los instrumentos fueron robados, desarmados para refacciones y las rentas dejaron de ser un negocio. Para preservar la tradición, los organilleros decidieron organizar el sindicato “Unión de Organilleros del Distrito Federal y la República Mexicana” en 1975. Para cobrar una identidad propia, el sindicato usa un uniforme café militar en honor a la vestimenta del general Francisco Villa. Además de este gremio, existe otro llamado “Unión Libre” con uniforme gris.
Situación actual
Hoy en día los seguimos viendo cargar ese enorme equipaje que pesa cerca de 50 kilogramos. Sus melodías se disuelven en la música que orquestan las grandes plazas. La mano se mueve en círculos y la música emerge, aunque ningún bucle es igual que otro, cada uno posee su propia melancolía.
Cada organillo puede tener hasta ocho melodías, las más comunes son Las mañanitas y Las golondrinas. La música suena gracias a un gran cilindro con un alambres que permite hacer sonar las notas. Para que una melodía se actualice en un organillo, se requiere de un trabajo minucioso, complicado de realizar hoy en día.
