Conoce la comunidad en Ixtapan de la Sal donde los artesanos labran la madera

De Ixtapan de la Sal, en el Estado de México, es conocida la alfarería de San Pedro Tecomatepec, poblado cercano a la cabecera municipal, aquí se producen ollas, jarritos y un sinfín de platos y cazuelas de barro rojo. Sin embargo, menos conocidas son las piezas de madera que se hacen en los pueblos aledaños. Uno de ellos es en Los Naranjos, comunidad donde los artesanos saben labrar la madera. Ahí acudimos a un obraje que hace honor a su pueblo: Taller El Naranjo.

El olor a madera verde y aserrín se acentuaban cada vez que Delfino Rogel usaba el torno, primero colocó la madera en la máquina, después la hizo girar y acercó una cuchilla, ese fierro bien afilado que cortó como mantequilla el palo, poco a poco le dio forma ovalada, luego afinó el corte hasta semejar una gota de agua, el resultado fue un trompo, el cual decoró tomando un pedazo de madera y frotándolo contra la pieza en rotación, quemando la superficie por la fuerte fricción, dando una coloración café oscura.

“Hacer estas piezas me hace sentir alegría, no hay como ver a los niños correr y jugar con las cosas que hago” cuenta Delfino, quien comenzó en este oficio gracias a su padre y su abuelo. De ellos aprendió no sólo el arte de hacer trompos, también el de elaborar salseras con figuras de animales, cucharas y varios tipos de juguetes tradicionales. A transformar la madera pues.

Sus diseños han pasado de los juguetes típicos a creaciones de madera más elaboradas. Ahora también le da forma a tablas de multiplicar en forma de barras que giran dentro de un tablero, memoramas, baleros, juegos de mesa o avioncitos. En cuanto a la materia prima, utiliza varias maderas: fresno, jacaranda, aile y pino. En el caso de las cucharas y utensilios de cocina usa granadillo, una madera oscura, resistente a la grasa, cuya dureza la hace más complicada de labrar.

A todo esto se suma un hecho importante: “la madera la obtengo de árboles caídos o de aquellos que son retirados por las autoridades en trabajos de obras públicas” comenta Delfino. Motivo por el cual éste y otros talleres son amigables con el ambiente, al no propiciar la tala de árboles, por el contrario, cada año diversos artesanos participan en la reforestación de los montes.

Sin duda, dar una vuelta por Los Naranjos, en Ixtapan de la Sal, da otra perspectiva sobre el trabajo en madera, una actividad donde la variedad de productos sólo tiene un límite, la habilidad e imaginación de los artesanos.

Artesanías El Naranjo

Domicilio conocido s/n, a un costado del depósito de agua, Los Naranjos, Ixtapan de la Sal
Cel. 722 4007183

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Francisco Palma Escritor y fotógrafo. “México es muchos Méxicos” y en cada uno de ellos busca aprender algo nuevo.