¡Los tiempos cambian! Cinco oficios desaparecidos en México
Estos oficios desaparecidos, apenas el siglo pasado estaban vigentes y ocupaban a miles de personas. ¿Adivinas cuáles son?
Vemos una fotografía en blanco y negro del siglo XX y nos invade la nostalgia al reflexionar cómo han cambiado las cosas, y prueba de ello son los oficios desaparecidos. Te contamos sobre cinco de ellos, que eran indispensables para el buen funcionamiento de la sociedad.
Mecanógrafo, uno de los oficios desaparecidos
¿Alguna vez usaste un armatoste de estos? La máquina de escribir se inventó en el siglo XIX y se usó durante casi todo el siglo XX. La persona que la operaba recibía el nombre de mecanógrafo y era indispensable en las oficinas de todo el mundo, donde debía escribir con soltura y velocidad, sin necesidad de mirar el teclado. De hecho, existía una medida de velocidad llamada Palabras Por Minuto (PPM).
Sin embargo, en la década de los ochenta, las computadoras sustituyeron a las máquinas de escribir y por lo tanto, a los mecanógrafos.
Telegrafista
El telégrafo fue inventado en la primera mitad del siglo XIX; se considera la primera forma de comunicación eléctrica del mundo y fue la única a distancia por casi un siglo. En nuestro país se inauguró la primera línea telegráfica en 1851, la cual revolucionó la vida social, económica y política del país. Debido a la gran demanda de operadores que el país requería, en 1930 se creó la Escuela Nacional de Telegrafistas.
Actualmente, según datos del Gobierno de México, siguen vigentes más de mil 700 tiendas Telecomm que brindan servicios de telegrafía a lo largo del territorio nacional pero es evidente el desuso de esta herramienta y en consecuencia, de sus operadores.
Telefonistas se suman a los oficios desaparecidos
Si has visto una película ambientada en la Segunda Guerra Mundial, recordarás a las operadoras intercambiando cables aquí y allá. Ellas tenían la responsabilidad de lograr que la red telefónica funcionase, pues conectaban a dos personas ubicadas en diferentes lugares a través de un cable y dos clavijas. No obstante, en la década de los ochenta, el sistema telefónico de cables fue sustituido por computadoras, marcando el final de una era en las telecomunicaciones del mundo.
Lechero
Hace más de medio siglo, los lecheros tradicionales eran muy comunes en el México moderno. Viajaban en bicicletas con una canastilla trasera donde cargaban las botellas de vidrio con una tapa metálica y repartían casa por casa. Era una profesión no exenta de peligro.
Igualmente, los consumidores intercambiaban envases vacíos para recibir «leche fresca, directa de las granjas productoras”. No obstante, había que hervirla antes de beberla para garantizar su buen estado.
Por último, este oficio prácticamente vio su final en los ochenta, cuando se popularizó la garrafa de plástico que facilitaba la transportación del producto y los lecheros fueron reemplazados por los supermercados.
Boticario
La profesión de boticario tuvo su auge durante el periodo colonial y hasta finales del siglo XIX. Los boticarios, quienes tenían grandes ganancias, mezclaban ingredientes como el arsénico blanco, animales y sus partes; raíces, especias como la pimienta, semillas y resinas.
Además, las boticas se ubicaban en conventos y hospitales. No obstante, a principios del siglo pasado las autoridades sanitarias sustituyeron el nombre de las boticas por farmacias y el resto es historia.
¿Se te ocurre algún otro oficio desaparecido?