Santa Julia
Visita este Barrio Mágico ubicado al poniente de la Ciudad de México y revive en sus calles y rincones una de las historias más famosas de ladrones-justicieros: la del Tigre de Santa Julia. ¡Te sorprenderá!
Un poco de historia
Al término de la conquista de Tenochtitlan, Hernán Cortés se adjudicó inmensos terrenos, uno de ellos fue la Tlaxpana o “lugar donde se barre”, de gran extensión y anexo a la antigua calzada México-Tacuba, donde estableció una huerta.
En los terrenos de la prehispánica zona de Tlaxpana se formó, durante la segunda mitad del siglo XVII, la Hacienda de la Ascensión de Cristo Nuestro Señor, cuyo propietario fue el capitán Pedro Ruiz de Castañeda. Esta propiedad limitaba al norte con la México-Tacuba, al oriente con el Rancho de Santo Tomás de los Tepetates, al sur con el río de los Morales y al poniente con el río de los Areneros; y producía trigo, maíz, frijol y gran diversidad de frutas y legumbres.
A fines del siglo XIX la finca ya había tenido muchos propietarios; la última fue Julia Gómez de Escalante, quien conformó una sociedad con Eduardo Zozaya en 1894 para fraccionar la hacienda y convertirla en un espacio habitacional con manzanas originales de 200 m de largo por 140 m de ancho, y calles de 15 m de anchura. Fue así como en 1902 nació la colonia Santa Julia, que después cambiaría su nombre a Anáhuac. Desde un inicio se planeó que sus calles llevaran los nombres de personajes y deidades mexicas, como Axayácatl, Tláloc y Tonantzin.
Uno de sus habitantes más antiguos refiere que “doña Julia [Gómez] era tan buena, que todo mundo le decía que era una santa, así nació el nombre de este lugar: Santa Julia. Para nosotros la Tlaxpana y la Anáhuac… son Santa Julia, sólo existe el barrio de Santa Julia.”
Hoy en día, la colonia Anáhuac se compone de varias unidades habitacionales, casas unifamiliares de un nivel, bodegas de tamaño mediano, escuelas públicas y privadas, templos católicos y algunos protestantes, pequeñas fábricas y talleres de todo tipo.
Voces y anécdotas del ayer
El personaje que hizo célebre a este barrio fue el Tigre de Santa Julia, José de Jesús Negrete Medina, ladrón de profesión. Era conocido por varias fechorías, como el asesinato de dos gendarmes que estuvieron a punto de capturarlo en el barrio de Santa Julia, motivo por el cual le pusieron el sobrenombre de El Tigre. Después de ser capturado defecando en el Callejón del Nopalito, en el barrio de Puerto Pinto en Tacubaya, fue encarcelado en la prisión de Belén y fusilado en el patio. Otras versiones lo señalan como un héroe que robaba a los ricos para darle a los necesitados. Respecto a su captura, los vecinos más antiguos señalan que el sitio donde fue atrapado se ubicó al costado poniente del mercado, donde había unos hornos de tabique; otros afirman que fue donde se levantaron unos condominios modernos cercanos al Circuito Interior. Este personaje legendario dejó para la posterioridad la frase popular: “Lo agarraron como al Tigre de Santa Julia”.
Tómalo en cuenta
Los comercios de tradición de Santa Julia se ubican en la colonia Tlaxpana. Uno de ellos lleva 46 años ofreciendo platillos elaborados con frescos mariscos en un ambiente totalmente familiar: El Canto de la Sirena (calle de Axayácatl), la panadería El Mejor Pan, el Molino Buenos Aires y la cantina La Fama, en Axayácatl esquina con Quetzalcóatl.
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1. Empieza tu recorrido sobre la calle de Axayácatl, a media cuadra del Circuito Interior Melchor Ocampo. Saltará a tu vista el Templo del Divino Rostro por su espectacular estilo neogótico en el que sobresalen los arcos ojivales, el vitral de la ventana del coro, el remate de forma triangular, y la ligereza de sus torres puntiagudas. Su interior, de una sola nave cubierta con bóvedas nervadas, posee un arco ojival enmarcado por dos arcos menores que conforman el altar principal. Un lambrín con arcada decora la parte inferior de sus muros laterales, junto con coloridos vitrales.
2. Una cuadra adelante llegarás al Mercado de Santa Julia, dividido en dos secciones: ropa y alimentos. En este último hay locales donde se venden carnitas y el clásico chicharrón prensado. Siguiendo por Axayácatl alcanzarás la calle Laguna de Guzmán, ahí hay un pequeño tianguis donde se ofrecen herramientas, libros y artículos usados.
3. Camina rumbo al corazón de la colonia Santa Julia; puedes hacerlo por la calle Laguna de Términos, colmada también de diversos comercios: carbonerías, vidrierías, talleres, abarrotes y tianguis de frutas y vegetales. Seguramente escucharás pasar una camioneta cuyos tripulantes anuncian con bocina en mano la compra de colchones, refrigeradores y mil objetos usados. Toma la calle Lago de Chalco y dobla en Laguna de Tamiahua; una cuadra adelante está el Parque Salesiano, lugar fresco por la sombra de tantos árboles que lo componen, junto con áreas de juego para niños, bancas, jardines cercados y la escultura de Felipe Carrillo Puerto, obra del escultor Humberto Peraza.
4. Sobre la calle Colegio Salesiano te sorprenderá la Parroquia de María Auxiliadora que saldrá a tu encuentro de forma inesperada. Su portada de estilo neogótico destaca por sus arcos ojivales bellamente ornamentados y sus enormes vitrales; en el remate se aprecia una balaustrada formada por esbeltas columnas y un par de imponentes torres de campanario de forma puntiaguda. Encima del arco de acceso principal observarás en relieve la figura de San Juan Bosco (1815-1888), fundador de la congregación salesiana y educador excepcional. El proyecto fue realizado en 1893 por el arquitecto José Hilario Elguero; sin embargo, su construcción tomó muchos años, pasando por la Revolución de 1910 y la Guerra Cristera entre 1926 y 1929. Su interior es igual de soberbio; llaman la atención seis capillas–nichos con variadas imágenes de santos y vírgenes. Asimismo, son de admirarse los vitrales polícromos de sus muros laterales y el altar mayor precedido por la Virgen y el Niño Jesús cobijados por un baldaquino de estilo neogótico realizado en mármol.
5. Del costado norte del Parque Salesiano toma la calle Laguna del Carmen hacia el oriente y, en su cruce con Lago de Chalco, encontrarás un pintoresco conjunto de comercios formado por algunas casonas antiguas de 1910 que te harán imaginar la fisonomía original de esta zona.