Yayo González de Paté de Fuá: «México me ha transformado»
Hace dos décadas Yayo pisó por primera vez tierras aztecas persiguiendo el sueño mexicano. Tenía 18 y, mochila al hombro, viajó con un amigo a la CDMX con la intención de quedarse a vivir.
Yayo González es director, compositor y cantante de Paté de Fuá, una banda que mezcla estilos musicales como jazz, tarantelas y tango. Tienen cinco álbumes en su haber y el 5 de este mes estrenarán el cuarto, “Película Muda 2da Parte”.
Hace dos décadas Yayo pisó por primera vez tierras aztecas persiguiendo el sueño mexicano. Tenía 18 y, mochila al hombro, viajó con un amigo a la Ciudad de México con la intención de quedarse a vivir. “México era una fantasía. En Argentina pasaba seguido por la Secretaría de Turismo de México, de donde colgaban carteles enormes de las playas del Caribe, esas que los extranjeros sólo vemos en películas como La Laguna Azul. México se instaló en mi mente, así que junté dinero y compré mi vuelo”. Al quedarse sin dinero regresó a su país… aunque sólo por un par de años. “Terminé mi carrera de músico y volví a México para quedarme”.
“En ese primer encuentro la capital me pareció exuberante; es una ciudad de locos, pero dentro de su caos, problemáticas y contradicciones, conserva una cierta energía relajada. Ves a alguien fijo en la calle y te dice ‘buenos días’. Además, ¿en dónde más puedes caminar por el Centro Histórico y toparte con una ruina? Es una ciudad que no te la acabas, una estrella de muchas puntas”.
Un país con personalidad
Yayo asegura conocer México mejor que su propio país (y es que junto con su banda ha visitado todos los estados). ¿Sus favoritos? Tijuana y Ensenada. “Tijuana tiene un choque cultural que no existe en ningún otro lugar del mundo. ¡Dudo que haya otra frontera tan contrastante! Ensenada está a una hora y media; hay una gastronomía impresionante y una cultura de vino que me deja impactado cada vez que voy”.
De viajar lo que más disfruta es contemplar paisajes naturales. “Me gustan los lugares donde huele a mar o a bosque. Las Bahías de Huatulco me dejaron fascinado cuando las conocí; entonces las últimas tres estaban casi vírgenes. Me encantaron porque cada una tiene su propia personalidad”.
Pero, para Yayo, lo mejor de México es la calidad humana de su gente. “Si eres amable te devuelven el doble de amabilidad, y eso es simplemente maravilloso. Yo venía de Argentina con muchos vicios, y la gente de aquí me los ha curado. México es un país que me ha transformado”.
Qué comer
Un aguachile acompañado con cerveza en el malecón de Mazatlán.
Dónde salir de noche
San Cristóbal de las Casas, Chiapas (al oscurecer hay mucha movida).
La experiencia imperdible
Cruzar por tierra la frontera de Tijuana hacia San Diego. “Yo la he cruzado como mínimo 10 veces. Es una experiencia muy interesante que le recomiendo a cualquiera”.