La Casa de Iturbide, la historia de la familia real de México que aún existe
¿Sabías que Maximiliano y Carlota adoptaron dos nietos de Agustín de Iturbide? Te contamos sobre la Casa de Iturbide, los "herederos" al "trono de México".
Aunque breve, el Primer Imperio Mexicano dejó una huella profunda en la historia de nuestro país, de ello que haya existido un segundo intento por establecer un gobierno imperial en México con Maximiliano y Carlota como protagonistas. Y aunque parezca increíble, el destino de ambos del Primer y Segundo Imperio estuvieron unidos, pues el emperador Maximiliano no sólo buscó restablecer dicha forma de gobierno, también intentó a la Casa de Iturbide de nuevo al poder.
Tras el fusilamiento de Agustín de Iturbide, la emperatriz Ana María decidió abandonar México. Inicialmente quiso vivir en Colombia, pero debido a que no habían medios de transporte disponibles, se dirigió a Estados Unidos. En su matrimonio con Iturbide, la emperatriz había procreado diez hijos, de los cuáles sólo uno murió a temprana edad. Sus nombres eran Agustín Jerónimo, Sabina, Juana, Josefa, Ángel, Salvador, María, Dolores, Felipe y Agustín Cosme.
En calidad de hijo primogénito de Agustín de Iturbide, Agustín Jerónimo y sus descendientes se convirtieron en potenciales herederos al trono si el Imperio Mexicano era restaurado. Aunque lo anterior sólo se logró de forma intermitente de 1864 a 1867, sí se incluyó a la Casa de Iturbide para que ésta recuperara sus privilegios políticos. Desde entonces, la familia de Iturbide conserva como tradición propia el considerarse una familia real. Su historia fue la siguiente.
Agustín Jerónimo de Iturbide
El mayor de los hijos de Iturbide, Agustín Jerónimo, nació en 1807 en la Ciudad de México. Cuando la Congreso Constituyente coronó a su padre como emperador, Agustín Jerónimo fue designado como príncipe heredero. Durante el exilio acompañó a su familia a Europa. Sin embargo, no realizó el viaje de regreso junto a Agustín de Iturbide, ya que permaneció en el Ampleforth College de Inglaterra hasta concluir sus estudios.
Antes de su fusilamiento, Agustín de Iturbide escribió una carta para su hijo invitándolo a ser un buen ser humano. A los veinte años, el mayor de los Iturbide se dirigió a la Gran Colombia, allí estuvo al servicio del libertador Simón Bolivar con quien forjó una solida amistad. Tuvo una hija fuera del matrimonio en Perú, cuyo nombre fue Jesusa de Iturbide, que posteriormente se casaría con el presidente peruano Nicolás de Piérola Villena.
En 1830, cuando el veto de la exfamilia imperial se levantó en México, el Jefe de la Casa Imperial regresó y trabajó como diplomático del gobierno en Estados Unidos e Inglaterra. Murió en Nueva York en 1866. En su testamento designó a su sobrino Agustín de Iturbide y Green, hijo de su hermano Ángel, como heredero al trono.
Restauración de la Casa de Iturbide por Maximiliano
Agustín de Iturbide y Green
Agustín de Iturbide y Green nació en la Ciudad de México el 02 de abril de 1863. Cuando el Segundo Imperio Mexicano se conformó, pasó a la tutela del emperador Maximiliano. La intención del emperador austrohúngaro era unificar los dos imperios y dar sucesión a la Casa de Iturbide a través del pequeño Agustín, o de su primo Salvador de Iturbide y Marzán. La decisión de Maximiliano atendía en parte su carencia de descendientes. Para su tutelaje y educación, se llamo a la corte a Josefa de Iturbide y Huarte, tía paterna de los niños. Sólo a estos tres miembros de la Casa de Iturbide se les permitió vivir en México y recibieron el título de príncipes.
Mientras que Salvador fue enviado a Europa a estudiar. Agustín de Iturbide y Green permaneció junto a los emperadores y su tía, quienes se encargaron de su educación.
Cuando el Segundo Imperio Mexicano cayó en 1867, los padres de Agustín decidieron que el joven partiera a Inglaterra a estudiar. Posteriormente, viajó a Estados Unidos para estudiar en la Universidad de Georgetown. Luego volvió a México e inició una carrera en el ejército, pero tras lanzar una crítica al régimen autoritario de Porfirio Díaz fue encarcelado por once meses.
Al salir de prisión, Agustín se exilió en Estados Unidos y se dedicó a la docencia. Durante aquel tiempo desarrolló paranoia, ya que pensaba que el régimen porfirista lo intentaría asesinar, lo cual le produjo dos crisis nerviosas. Se casó en dos ocasiones, sin embargo no tuvo hijos. Murió en 1925 en Washington, aunque hoy sus restos yacen en Filadelfia junto a los de la emperatriz Ana María. Tras su muerte, María Josefa Sofía de Iturbide fue declara la Jefa de la Casa Imperial de Iturbide.
Salvador de Iturbide y Marzán; la Casa de Iturbide en Europa
Salvador Agustín Francisco de Paula de Iturbide y Marzán nació el 18 de septiembre de 1849. Junto a su primo fue adoptado por el emperador Maximiliano con la intención de unificar las dinastías y obtuvo el título de Príncipe de Iturbide. El contrato de tutela de los nietos del primer emperador mexicano se realizó en el Castillo de Chapultepec.
Salvador, quien tenía 16 años al momento de ser adoptado por Maximiliano y Carlota, fue enviado a París a estudiar. Durante su estadía en Francia estuvo al cuidado del embajador José Hidalgo, hasta que se trasladó a Hungría en 1867.
Cuando el emperador Maximiliano fue fusilado en México, el emperador Francisco José I de Austria le otorgó una pensión de 10,000 francos a Salvador y lo designó Príncipe de Austria. Es decir, Salvador heredó el título nobiliario de Maximiliano en Europa.
Salvador permaneció el resto de su vida en Europa. Se casó con la baronesa Gizella Mikos y llegó a formar parte del ejército del Sumo Pontífice. Murió en 1895 y está sepultado en Venecia.
Josefa de Iturbide y Huarte
Josefa nació en Guanajuato en 1814, fue hija de Agustín de Iturbide y Ana María Huarte. En el Primer Imperio Mexicano recibió el título de Princesa Mexicana, mientras que en el Segundo Imperio fue designada Princesa de Iturbide.
Fungió como dama de la corte de Maximiliano y Carlota, con quienes tuvo una excelente relación, y fue cotutora de su sobrino Agustín de Iturbide y Green. Cuando Maximiliano fue condenado a muerte, éste escribió una conmovedora carta a Josefa en la que comparaba su muerte con la del primer emperador de México. Los lazos de amistad entre Carlota y Josefa permanecieron hasta que las facultades mentales de la emperatriz mermaron.
«Mi queridísima amiga: Le mando un recuerdo de nuestro amado emperador, porque sé que es usted digna de poseerlo. Le adjunto otros dos para sus sobrinos, Salvador y Agustín, de quienes fue tutor, y cuando el segundo sea mayor, estoy segura que lo apreciará. No necesito decirle cuánto gusto me dio saber de la pensión regular que recibe Salvador, del pequeño Agustín y las demás noticias que me dio usted.»
Expresó Carlota a Josefa en una carta.
María Josefa Sofía de Iturbide y Mikos
María Josefa Sofía de Iturbide y Mikos nació en el Imperio austrohúngaro el 29 de febrero de 1872, fue hija del príncipe Salvador de Iturbide y Marzán y de la baronesa Gizella Maria Terezia Mikos de Tarrõdhàza. Pasó gran parte de su juventud en Venecia, donde tuvo una vida modesta y religiosa.
Se casó en 1908 con Johann Nepomuk Tunkl von Aschbrunn und Hohenstadt, de su matrimonio tuvo dos hijas, quienes fueron registradas con el apellido Tunkl-Iturbide. Cuando Johann murió en 1915, contrajo segundas nupcias con Charles de Carriere en 1923, matrimonio del cual no hubo descendencia.
Al finalizar la Segunda Guerra Mundial, María Josefa y su esposo fueron encarcelados por el gobierno comunista rumano. Aunque eran avanzados de edad, se les acusaba de monárquicos. Ambos fallecieron de forma no esclarecida en 1949, muy probablemente asesinados. El heredero de la Casa de Iturbide paso a ser su único nieto, Maximilien von Götzen-Iturbide.
Maximiliano de Gotzén-Iturbide, actual heredero de la Casa de Iturbide
Maximiliano de Gotzén-Iturbide es el actual Príncipe Imperial de México. Mientras que su nombre rinde honor al emperador Maximiliano, quien adoptó a su bisabuelo Salvador, su apellido compuesto autorizado por el Ministerio del Interior de Hungría permite que se le reconozca como descendiente de Iturbide.
Maximiliano o Maximilien von Götzen-Iturbide está casado con María Anna de Franceschi, quien desciende de una línea de nobles croatas y venecianos. Tienen dos hijos nacidos en Australia: Fernando, que sería el segundo en la línea de sucesión al “trono imperial”, y Emanuela, nacida en 1998.
Aunque Maximiliano no ha mostrado interés en tener algún papel político, es considerado el legítimo heredero de la Casa de Iturbide. Cabe señalar que en México no se reconoce la monarquía y que el artículo 12 de la Constitución establece que “no se concederán títulos de nobleza, ni prerrogativas y honores hereditarios, ni se dará efecto alguno a los otorgados por cualquier otro país”. En caso de que Maximiliano de Gotzén-Iturbide quisiera arribar a México, lo haría como cualquier extranjero.
Maximiliano se desempeña actualmente como empresario en distintos países, incluyendo México, donde tiene negocios inmobiliarios en los estados de Michoacán y Jalisco.