Lola Cueto, la pionera del teatro guiñol en México
El 24 de enero de 1978 falleció la marionetista mexicana Lola Cueto. Amante y defensora de las tradiciones populares mexicanas. Te compartimos su biografía.
Lola Cueto fue una destacada marionetista, pintora, escritora, grabadora y diseñadora de títeres mexicana. Es reconocida como la pionera del teatro guiñol en México. Además de haber sido la primera mujer en ingresar a la Academia de San Carlos como estudiante. Amante de los juguetes mexicanos y defensora de las tradiciones populares del país, su legado es sin duda uno de los más notables del siglo XX.
Pasión por la cultura popular mexicana
El 2 de marzo de 1897, nació en la Ciudad de México, María Dolores Velázquez Rivas, mejor conocida como: Lola Cueto. Desde joven desarrolló su enorme creatividad a través de las artes plásticas, el teatro guiñol, la creación de títeres, el arte del papel picado y la escritura. También fue una gran coleccionista de juguetes populares mexicanos.
A los 12 años de edad se inscribió en la Academia de San Carlos (Escuela Nacional de Bellas Artes). A este recinto asistían principalmente varones, por lo que fue la única mujer en el grupo de pintores. Al lado de artistas como David Alfaro Siqueiros, formó parte de la primera Escuela de Pintura al Aire Libre.
Lola y Germán Cueto
Lola vivió rodeada de un rico ambiente cultural en el cual destacaban figuras como: Fermín Revueltas, Frida Kahlo, Ramón Alva de la Canal, Gabriel Fernández Ledesma, Diego Rivera, Angelina Beloff y Germán Cueto. Con este último contrajo matrimonio en 1919, y tiempo después decidieron vivir en París. Fue así que entre 1927 y 1932, años en los que radicaron fuera del país, alcanzaron un gran desarrollo artístico en sus respectivas obras. Lola creó hermosos y únicos tapices a partir de su propia técnica, mientras que Germán experimentaba con lo que se convertiría en su vocación, la escultura abstracta.
En cuanto a su trabajo en colaboración, la pareja elaboró máscaras de yeso y cartón que reflejaban rasgos del pueblo mexicano; juntos crearon diferentes obras en tapices, papel picado y juguetes tradicionales mexicanos. También fundaron las compañías de teatro Rin Run, El Nahual y El Colorín. Aunado a todo esto, una de las partes más importantes de su labor fue el proyecto pedagógico que emprendieron y que tenía como base la fusión del arte con la vida diaria.
Primeros muñecos guiñol en México
En su regreso a México, fundó al lado de otros artistas, la Liga de Escritores y Artistas Revolucionarios (LEAR). Fruto de este hermoso proyecto nacieron los primeros muñecos guiñol en México, así como las primeras obras en las que se incluyeron. El renacuajo paseador es la que más destaca, y a la que Silvestre Revueltas musicalizó.
Todos sus proyectos estuvieron enfocados en la enseñanza, alfabetización, educación y diversión de los niños y jóvenes. En 1934 fue nombrada animadora teatral del Teatro Escolar del Departamento de Bellas Artes, convirtiéndose en una importante promotora cultural.
En cuanto a su obra artística, durante los años cuarenta retomó las clases en la Academia y dominó una de sus técnicas más conocidas: el grabado. Para Lola Cueto no existían límites, por lo que conquistó todas las técnicas de la época, lo que la llevó a impartir clases en el Mexico City College y a exhibir sus obras con gran éxito, tanto en México, como en Europa y Estados Unidos.
Obra y labor
Lola Cueto fue una mujer talentosa, sensible y comprometida con su país y su época. Le preocupaba la invasión en el mercado de juguetes hechos en serie y despersonalizados, por lo que dedicó gran parte de su vida a coleccionar y documentar figuras y juguetes populares mexicanos.
Su obra es basta y destaca su trabajo en tapices con la técnica de cadeneta y musgo, prácticas que a falta de seguidores desaparecieron, haciendo de la obra de Lola piezas únicas en todos los sentidos. También tuvo una importante incursión en la pintura de caballete y en la elaboración de papel picado.
Hoy en día su obra forma parte del acervo de diferentes museos e instituciones del país. Sin duda Lola Cueto es una de las artistas mexicanas más prolíficas del siglo XX. Falleció el 24 de enero de 1978 a la edad de 80 años, en su casa ubicada al sur de la Ciudad de México.
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