Vístete de México, de Maison Manila - México Desconocido
Buscador
Ver revista digital
Arte y Artesanías

Vístete de México, de Maison Manila

Ciudad de México
_DSC6426
© cortesía Maison Manila

Te contamos sobre Maison Manila, un despacho de diseño textil que está haciendo ropa mexicana de calidad y belleza. ¡Vístete de México!

Mi experiencia con la ropa hecha por diseñadores mexicanos me había dejado curada de espanto. Mal cortada, de pésima calidad y peores acabados. Por eso me sorprendió tanto entrar a la tienda de la colonia Roma y descubrir las prendas de Maison Manila. Hechas en México, impecables, realmente perfectas.

Alguien había diseñado una línea de ropa pensando en lo diversos que son los cuerpos mexicanos. Alguien había puesto la calidad por encima del estilo “modernito”. ¿En serio? Entre incrédula y curiosa, me acerqué al mostrador a preguntar quién era ese alguien. Una semana después estaba en el showroom de Maison Manila, dispuesta a platicar con su creadora, Rossana Díaz del Castillo.

La entrevista con la creadora de Maison Manila

Antes de que llegue Rossana, tengo tiempo de mirar con calma las piezas colgadas en un rack. La combinación de materiales nobles (seda, algodón, lino e incluso telas de gran tecnología) con una costura de alta precisión no es algo que se encuentre muy seguido en México.

La puerta del taller está entreabierta y me asomo para felicitar a las costureras. La luz entra en cascadas por el ventanal e ilumina las mesas de cinco mujeres que cortan, cosen y platican en calma. Tienen más de cuatro años trabajando con Rossana y aman tanto su trabajo que siempre se emocionan cuando ven una prenda terminada. “Con toda la razón, les digo, su labor es preciosa.” Ellas ya lo saben, pero igual reciben mi comentario con una sonrisa generosa.

¡Descubre el México Auténtico a través de nuestro podcast!

Rossana llega segundos después. Lleva puesto uno de los modelos de su colección Xochipilli, que se presentó en la pasada edición del Mercedes Benz Fashion Week. Es un vestido recto que llega casi hasta el tobillo, de una sola pieza, de color buganvilia y una textura aterciopelada que me recuerda a las flores del Día de Muertos.

Las características del trabajo de Maison Manila

Apenas comenzamos a platicar y ya percibo la enorme congruencia que hay entre sus prendas y su filosofía. Me hace pensar en la palabra bold, que tanto se usa en la jerga del mundo de la moda. El término en inglés refiere al uso concentrado de un color, pero también describe a alguien que tiene suficiente confianza en sí mismo como para salir de lo convencional, aventurarse y destacar. Una posible traducción al español sería “sólida”. Y aplica perfectamente para describir la propuesta de Maison Manila.

La trayectoria de Rossana Díaz del Castillo, creadora de Maison Manila

Aunque Rossana abrió Maison Manila hace casi tres años, su relación con la moda empezó en la infancia. Nació y creció en Xalapa, después migró a Monterrey para estudiar en el CEDIM y luego vivió en Milán, Italia, donde hizo una maestría en el célebre Instituto Marangoni y se quedó un año más a trabajar.

Si bien los estudios le dieron herramientas para profesionalizar su vocación, las bases las recibió de su abuela, quien la enseñó a coser cuando era niña. Para esta veracruzana, la moda es una forma de vida que se refleja en las cualidades de su marca: durabilidad, atemporalidad, elegancia. “El mundo está regresando a esos valores; creo que ya es tiempo de que invirtamos en cosas con sustancia y calidad”, afirma convencida.

Las prendas de Maison Manila no tienen nada que ver con la fugacidad del fast fashion, esa ropa desechable a la que nos han acostumbrado las marcas transnacionales, cuyo ritmo de producción está muy alejado de la sostenibilidad y el respeto a los ecosistemas.

Los diseños de Rossana, en cambio, han sido concebidos para durar y mantener su vigencia durante muchas temporadas. “A mí me gusta hacer ropa de verdad, advierte orgullosa. Es cierto que juego con materiales, brillos y texturas… Pero es ropa que la gente puede integrar a su vida diaria. Busco que sea favorecedora para todo tipo de cuerpos, que se adapte a muchas situaciones. Por eso uso colores sólidos, pocos botones y cierres. Es ropa que le funciona a personas que viajan mucho porque es fácil de cuidar en casa, es cómoda y no se arruga”, dice mientras señala un saco del rack, que bien podría usar un hombre o una mujer de cualquier edad.

Como parte de una generación de creadores conscientes de los cambios que requiere el mundo, Rossana está convencida de que “la intención detrás de la ropa no es otra más que servir”. De ahí que, además de la durabilidad y la calidad, busca la fluidez, la flexibilidad y la funcionalidad, acorde con estos tiempos. Por eso, ideó una segunda línea de ropa llamada Manila Retreat.

“Es para estar cómodo, para descansar, para ir de vacaciones, o simplemente para cuando estás en tu casa y no quieres andar con la camiseta rota o en pijama. Aunque sea ropa de descanso, tiene telas que son un lujo en cuanto a la calidad; busco materiales naturales que duren mucho y que sean muy cómodos, como lino, seda o este algodón, hecho en telar de Oaxaca”.

Enseguida me muestra un traje de saco y pantalón que despierta todo mi deseo. El corte es hermoso y relajado, la tela de algodón es como un apapacho. “La hace una familia de Mitla que tiene un telar de pedal muy antiguo, heredado de varias generaciones. Con ellos estoy trabajando materiales para esta línea”.

Maison Manila en destinos mexicanos

Además de hacer ropa, Rossana sabe tomar fotos, hace dirección creativa para los videos de sus colecciones, crea conceptos visuales, pinta… Es una creadora en todo el sentido de la palabra. Ella realizó la imagen de la marca para que la comunicación visual transmitiera un mensaje redondo y preciso.

Viajera y enamorada de México, recurre a locaciones acordes al concepto de cada colección, como Tlacotalpan, Hidalgo o Xochimilco, entre otras. También trabaja de la mano con el fotógrafo Alexander Newman, quien logra atrapar la esencia del lugar sin perder el enfoque minimalista de Maison Manila.

Este proceso, cuenta Rossana, es como ir haciendo una pintura: “Desde el inicio pienso en los colores, en las telas, cómo se verían en una prenda funcional. Trabajo con colores y siluetas, voy creando un mundo alrededor de la ropa y a partir de ahí se crea el video y la foto”.

En la colección Xochipilli, por ejemplo, se trataba de ver a la naturaleza a través del color y de mostrar todo lo que representa Xochipilli. “Quería que fuera mexicano, pero no sobrecargado, sino muy coherente con el estilo minimal y estéticamente relajado.”

Explosión creativa

No cabe duda de que en México hay mucho talento, pero este no basta para lograr una calidad como la de Maison Manila. Rossana reconoce que fue en Italia donde recibió las herramientas necesarias para profesionalizarse: “Me enseñaron a usar muy bien los programas de diseño, a preparar presentaciones, a planificar los proyectos con procedimientos específicos para hacer realidad una idea, a manejar conocimientos especializados y técnicas para mantener la imagen de una marca en cierto nivel visual. Todo tiene que ser coherente”.

Y sí, Maison Manila es un ejemplo de coherencia. Se nota en su sitio web, en sus redes sociales, en la dinámica de su taller, en sus productos visuales y en sus colecciones.

Y también se nota que no está sola en esta aventura. Si bien ella se encarga de la dirección creativa, el otro pilar de la empresa es su socio, Federico, quien lleva la administración y las ventas. “Sin él, dice Rossana, nada de esto existiría.”

Quizá te interese leer:

diseño mexicanomaison manilamoda mexicanatextiles mexicanosvestidos mexicanos
Comentarios